Mar del Plata: Buscan a preso que usó a su bebé para escapar de la cárcel
Un convicto fue autorizado a visitar a su hijo recién nacido bajo custodia policial. Al llegar a su casa, tomó a la criatura y se la arrojó a los efectivos. El interno salió corriendo y se dio a la fuga. El hecho pone en duda a los servicios penitenciarios, criticados duramente por Mariotto. Realizan intensos trabajos de rastrillaje. El penal de Batán no emitió ningún comunicado oficial al respecto.
Luego de los cuestionamientos del Vicegobernador Gabriel Mariotto hacia Daniel Scioli y el Ministro de Seguridad, Ricardo Casal y el pedido de intervención del Estado por las condiciones que presentan las cárceles en la Provincia, un nuevo e insólito hecho pone en manifiesto las falencias en el sistema penitenciario bonaerense.
La policía de General Pueyrredón inició varios operativos de rastrillaje con el objetivo de recapturar a un joven de 22 años que estaba alojado en la cárcel de Batán. Sucedió el pasado sábado 14 pero la noticia no se dio a conocer inmediatamente. A pesar del grave acto de negligencia, la Unidad Penal 44 de Batán no emitió ningún comunicado al respecto.
Según la publicación del medio local Noticias y protagonistas, el llamativo suceso ocurrió cuando el recluso por robo agravado fue autorizado a visitar a su hijo recién nacido bajo el beneficio de "salida excepcional de detenidos". La maniobra implementada por el interno fue realmente increíble. El presidiario arribó a su domicilio en compañía de tres custodios, responsables de llevarlo nuevamente hacia la Unidad Penal de Batán. Por cuestiones de seguridad y evitar cualquier contratiempo, los efectivos supervisaron la propiedad antes de que el joven ingrese a su casa. Sin embargo, el delincuente había diseñado un plan para poder escaparse.
Mientras estaba conociendo a su hijo junto a sus familiares y la custodia directa de un policía que había entrado con él a la casa, el recluso tomó al bebé y lo arrojó hacia el efectivo que obviamente atinó atajar al pequeño. En ese instante, el convicto aprovechó para salir corriendo y huyó por un patio donde había un perro de gran tamaño que dejó pasar a su dueño pero que atacó a los policías que intentaban perseguirlo.
En la salida trasera de la casa, había una moto esperando al joven que abordó el vehículo y escapó sin ser alcanzado por los uniformados. A raíz de la cinematográfica fuga, las fuerzas policiales comenzaron a delinear y desarrollar varios operativos de rastrillajes para dar con el paradero del jóven, que aún permanece prófugo de la Justicia.