Miles de militantes despidieron a Cristina tras su último acto como Presidenta

Embargada por la emoción, Cristina Fernández de Kirchner se despide ante la militancia, acompañada por el gabinete saliente, gobernadores, organizaciones sociales, políticas y gremiales. 

Subió al escenario y saludó a los presentes posando su mano sobre el lateral del palco que luce una bandera argentina.

Ya en el atril montado en el lugar la Jefa de Estado escuchó los cánticos de la plaza y dijo: "Queridos compatriotas, quiero decirles que yo también los escuché, los escucho y los voy a escuchar siempre".

"Quiero decirles a todas y todos que si después de estos intensos doce años y medio, con todos los medios de comunicación hegemónicos en contra" y "..con las principales corporaciones económicas y financieras nacionales e internacionales" en contra y las "persecusiones y hostigamiento permanente de lo que yo denomino el partido judicial. Si después de todo eso... de tanto intento de golpes destituyentes" el gobierno ha restistido. 

Ya en relación a la jura de Maurido Macri indicó: "Vamos a entregar el gobierno. Me hubiera gustado poderlo hacer en el Congreso, me hubiera encantado, pero bueno..."
"Me hubiera gustado poder entregar los atributos del mando en la Asamblea Legislativa, pero bueno... la verdad es que he visto muchas medidas cautelares, contra la ley de medios, contra los decretos..." y sentenció: "En mi vida pensé que iba a haber un presidente cautelar durante 12 horas en mi país".

"Me dolió, confieso que me dolió como argentina, no lo merecía nadie", dijo a los manifestantes respecto a la decisión judicial que dictaminó que su mandato vence hoy a las 23.59.
La más saliente de sus expresiones a la que describió como peligrosa para la democracia fue: "Violentar la Constituciión y poner presidentes por decisión judicial"...

"Yo quiero decirles a todos y a todas, fundamentalmenre a todos los que hoy nos acompañan o nos escuchan desde su casa que se matengan unidos los argentinos y luego ilustró su situación "miren que no puedo hablar mucho porque a las doce me convierto en calabaza"...

Más adelante emprendió una recorrida por los logros de su gobierno poniendo énfasis en la situación económica y se dirigió a todos los sectores sociales destacando las premisas que impulsaron la inclusión de los jóvenes a la educación y a la política.

En una sucesión de hechos que relató bajo la consigna "podemos mirar a los ojos" tuvo un momento de especial emoción: "A los ojos de los jóvenes no los miro, porque en ellos me miro yo".

Para finalizar y frente al pedido de la militancia la Presidena dijo "Espero y le pido a Dios que dentro de cuatro años, quien tenga la responsabilidad de conducir los destinos de la patria pueda, frente a una plaza como esta, decirle a los argentinos que también puede mirarlos a los ojos".

"Cada uno de ustedes, cada uno de los 42 millones de argentinos tiene un dirigente adentro y cuando cada uno de ustedes, cada uno de esos 42 millones de argentinos sienta que aquellos en los que confió y depositó su voto y lo traicionaron, tome su bandera"...

En el cierre de su mesaje pronunció su agradecimiento: "Gracias por tanta felicidad, gracias por tanta alegría. Los quiero, los llevo siempre en mi corazón. Sepan que siempre voy a estar junto a ustedes. Gracias a todos".