La increíble historia de Jerónimo Villafañe, el último Chamán Kom de la Argentina
Nació en Chaco. De acuerdo a su relato, a los 4 años pasó una prueba de supervivencia y un eclipse de sol determinó que era el nuevo Chamán. Siendo pequeño, escapó de su tribu cuando un laboratorio experimentó medicinas con los tobas. Fue adoptado por un abogado que lo llevó a vivir de la selva a Vicente López. En 1973 fue dado por muerto pero logró una milagrosa recuperación. Durante su vida recorrió la provincia de Buenos Aires en la que asegura que "curó" a políticos, famosos, hogares e instituciones. Cuenta que estuvo en Malvinas y que habló con el Papa Francisco. Entre sus historias aparecen Duhalde, Ortega, y una maldición que pesa en Platense y Olimpo de Bahía Blanca.
Por Christian Thomsen Hall
El Chamán se deriva de la palabra tangus que se traduce en "sacerdote" capaz de curar enfermedades gracias a los conocimientos que posee de las hierbas existentes en la naturaleza. De esta manera, tiene la facultad de realizar sanaciones sin responder a una lógica causal, a través de la imposición de manos y desde los planos espirituales, contactando seres de luz o ángeles. Carlos Jerónimo Villafañe, es el único Chamán Toba Argentino, nacido en El Impenetrable, Chaco, nieto del Sanador Cacique Toba Pedro Jerónimo Pérez. Según dicen quienes lo conocen, posee dones naturales de clarividencia y sanador, realiza tareas solidarias para la humanidad, de cooperación y siempre en asistencia al prójimo.
En diálogo con LaNoticia1, Villafañe recordó su infancia. "En la comunidad toba las mujeres dan a luz a la vera de un arroyo. Como parte de la tradición, la machi, que es la mujer Chamán, me alzó y preguntó al cielo con qué facultad nacía. Esa cualidad es determinada por el sol recién a los 4 años. Fue durante ese ritual cuando se produjo un eclipse, lo que anunció la llegada de un nuevo Chamán, algo poco habitual que se da cada cientos de años. Sin embargo, en la tribu había algunas dudas, por lo que mi abuelo decidió dejarme solo en la selva siendo una criatura", relató el indígena que logró sobrevivir a los ataques de pumas, serpientes y yaguaretés que habitan El Impenetrable chaqueño, ganando así el respeto de su comunidad.
"El Chamán viene a ser como el Papa del catolicismo. Desde pequeño fui considerado una persona sagrada. Tocaba la panza de embarazadas y recibía a los bebés para que nacieran sin problemas", expresó Jerónimo, quien vivió una etapa difícil. "Durante mi infancia, el hombre blanco comenzó a contaminar las aguas y a desmontar los bosques. Además, un laboratorio usó la tribu para probar medicinas y algunos fueron muriendo". Frente a esto y aun siendo niño, el Chamán fue recibido por un abogado que defendía los derechos de los tobas y lo llevó a su casa de Vicente López. Allí, Villafañe fue criado en una cultura absolutamente nueva: "Me cambiaron la ropa, me cortaron el pelo y me pidieron que no dijera que era indio porque traía problemas".
En 1973, volcado a la cultura del "hombre blanco" y alejado de sus raíces, Villafañe vivió un momento clave en su vida durante la llamada “masacre de Ezeiza”, donde hubo 13 muertos y más de 300 heridos. Tras la asunción de Héctor Cámpora como Presidente, cientos de personas esperaban la llegada de Juan Domingo Perón a la Argentina, tras 18 años de exilio en Madrid. Jerónimo indicó que fue herido de un balazo en la cabeza y por unos minutos, dado por muerto en la morgue. Sin embargo, como cuenta en su libro, pudo recuperarse tras superar una ceguera y una parálisis temporal. Luego de este episodio, un indio mapuche marcó su destino y le dijo que "tenía que cumplir la misión para la cual fue encomendado".
A partir de allí, el Chamán inició su actividad social por toda la provincia de Buenos Aires, "realizando trabajos de eliminación de energía negativa en las casas y tratando enfermedades naturales y sobrenaturales". Tras la guerra de Malvinas en 1982, donde afirma que participó como "cabo de reserva", continuó su recorrido pregonando ayudar al prójimo. Así "curó" a cientos de personas, entre ellos artistas famosos y figuras políticas. Villafañe contó que fue él quien le enseñó a montar caballos a Osvaldo Laport en la novela "Más allá del horizonte". En la década del 90’ le tocó recibir a futbolistas de elite como Ariel Ortega y Enzo Francescoli, como así también al dirigente Eduardo Duhalde, que en aquella época "anhelaba ser Presidente de la República".
Villafañe, que en 2010 recibió el "premio a la hermandad" en el Sheraton Hotel y actualmente dicta clases de chamanisto en la escuela "Nido de Águila", utiliza para sus rituales una espada de 1,74 metros, medida que coincide exactamente con su altura. Una de sus tantas curaciones tuvo lugar en el estadio Roberto Carminatti, donde los dirigentes de Olimpo le ofrecieron una remuneración a cambio de que el equipo ascienda a la máxima categoría. Con el "Aurinegro" jugando en Primera, el Chamán reclamó su dinero, pero "desde el club dijeron que iban a pagar cuando el equipo salga campeón". Con esa respuesta, el referente Kom se fue de Bahía Blanca y curiosamente, actualmente el equipo bahiense marcha penúltimo en el Torneo Transición. Otro de los episodios deportivos más llamativos ocurrió entrada la década del 2000.
Acercado por varios allegados del club de Vicente López, el Chamán fue convocado a cambio de dinero para curar a Platense, equipo que venía de sufrir dos descensos de categoría en apenas dos años. Según relató Villafañe, "durante la curación se encontraron huesos humanos en el arco que da a la avenida General Paz" y pudo determinarse que "en la cancha había una maldición por estar en un terreno codiciado". Tras su intervención, el "Calamar" llegó a la final por un ascenso en 2005 y consiguió el ansiado campeonato en 2006. Además, en 2007 logró alcanzar un subcampeonato en la B Nacional que lo dejó a las puertas de la Primera División. Sin embargo, el monto acordado por 5 mil pesos nunca fue entregado al líder Toba, quien decidió alejarse de la institución.
Desde ese momento, el fútbol del "Marrón" entró en caída libre. Luego de pésimas campañas, en 2010 descendió a la B Metropolitana y desde hace 4 años no logra ascender, en algunos casos con resultados insólitos, como en 2013 cuando quedó a dos puntos del campeón Villa San Carlos, o en 2014, cuando perdió una final sobre la hora con Temperley, equipo que jugará la próxima temporada en Primera división. Una realidad diferente vive el equipo de básquet, que hace más de un año contactó al Chamán y le pagó una cifra cercana a los 10 mil pesos para "curar" el microestadio. A partir de ahí, el conjunto de baloncesto logró un inédito ascenso al Torneo Federal, donde actualmente es líder, y sueña con escalar hacia el Torneo Nacional de Ascenso, lo que marcaría un hito histórico para esa disciplina.
El Chamán, que en sus declaraciones a LaNoticia1 aseguró que el Papa Francisco lo llamó hace meses para saludarlo, remarcó "la importancia de que los pueblos originarios sean respetados de acuerdo a las leyes vigentes". En ese sentido, el aborigen que brinda charlas gratuitas en colegios, agradeció al Gobierno de Cristina Fernández por obtener su documento bajo su verdadero nombre. Por último, Villafañe destacó el valor de la naturaleza: "Lo que mis ancestros me legaron fueron preceptos sobre el cuidado de la Madre Tierra, su importancia y el valor del medio ambiente". Y advirtió: "Cada uno tiene que ser consciente de lo que hace en la vida y lo que hace con la Tierra. Hay que tener en cuenta que en la vida lo que se hace mal, se paga".