Este 2 de abril, en el marco del Día del Veterano y de los Caídos en Malvinas, se presenta el documental de los extripulantes del ARA General Irigoyen, un buque remolcador de la Armada Argentina que desempeñó actividades de búsqueda y rescate en el área de la Fuerza de Tareas 50, durante la guerra de 1982. 

LaNoticia1.com fue el único medio de la Provincia de Buenos Aires que estuvo presente el domingo 18 de agosto de 2019, cuando los extripulantes del ARA General Irigoyen se reencontraron en el buque, que actualmente permanece amarrado en la costanera de San Pedro donde funciona como museo. 

Los excombatientes se reencontraron en lo que fue un acontecimiento histórico de relevancia. Fue un acto sencillo, casi sin participación oficial pero la historia que se escondía tras ese puñado de hombres que se emocionaron en el reencuentro es la que explica uno de los tantos episodios que anidan entre los secretos de la guerra.

De acuerdo a lo que contaron en aquella ocasión a LaNoticia1.com, algunos de los tripulantes tenían 16 años, otros 20 y otros eran marinos de carrera. Todos compartieron esos meses a bordo y uno de ellos se encargó de contactarlos, Carlos Roggero, quien es el único reconocido por la Justicia como veterano de Malvinas. 

Las imágenes y los testimonios que se registraron en aquel reencuentro, donde los héroes volvieron a verse y subieron al buque que cruzó la zona de exclusión impuesta por el Reino Unido para cumplir la misión de rescate de un helicóptero, se transformaron en una película que desde este jueves ya puede verse gratis en YouTube. 

Según sus realizadores, "El Buque Fantasma" es un trabajo de investigación de 10 años que saca a la luz un secreto muy guardado por la Armada Argentina, "la discriminación de toda una tripulación de marinos como Veteranos de Guerra por una fuerte interna de altos oficiales en gobierno de facto". 

El ARA Comandante General Irigoyen fue construido en 1944 en Estados Unidos y participó en la Segunda Guerra Mundial bajo el nombre de USS Cahuilla. Fue vendido a la Armada Argentina en 1961, renombrándose bajo nombre actual y puesto fuera de servicio en 2009. Es conservado como buque museo en San Pedro.