Insólito: Una ordenanza desató una guerra entre el Intendente Zara y sus propios concejales de Juntos en Patagones
El gobierno municipal impulsó la Ordenanza Fiscal Impositiva. Pero como los concejales de Juntos por el Cambio no acordaron con la oposición, el propio Intendente negoció con el Frente de Todos. El bloque oficialista marcó la cancha y aprobó el proyecto original, desestimando el que había sido modificado por su jefe político. Zara adelantó que lo vetará.
En un hecho realmente insólito para la región, la Ordenanza Fiscal Impositiva desató una verdadera guerra entre el Intendente municipal de Patagones, José Luis Zara (Juntos por el Cambio) y los propios concejales de su espacio en el Concejo Deliberante.
Según pudo saber LaNoticia1.com, ante la falta de cintura de la presidenta del bloque de Juntos por el Cambio, Romina Colombi, para negociar con la oposición y aprobar la ordenanza, el mismo alcalde tuvo que reunirse con el Frente de Todos para alcanzar un acuerdo.
Pero eso no fue lo más curioso: Luego de que el Intendente logró un acuerdo con la oposición -bajando el aumento de tasas del 90% al 70% y cambiando algunos ítems, los mismos concejales de Juntos no aceptaron el acuerdo y la aprobaron sin las modificaciones acordadas.
De esta manera, los concejales de JxC le soltaron la mano al Intendente y aprovecharon que tienen mayoría en el Concejo para marcarle la cancha al alcalde. Por su parte, Zara adelantó que vetará la ordenanza y validará por decreto la que él había consensuado con la oposición.
Según informó el medio local ArgenSur, la situación se enmarca dentro de la feroz interna en la coalición de Juntos por el Cambio en Patagones, especialmente desde el ala de la UCR, que desde hace tiempo tironea para ganar más espacios de poder dentro de la gestión.
"¿Cómo queda parado el intendente ante semejante golpe bajo? ¿Qué buscan con esta desobediencia sus socios de la UCR? ¿Querrán los radicales marcarle la cancha para el próximo cierre de listas?", fueron algunas de las preguntas que se hicieron en ese medio local.
Lo concreto es que este fuerte gancho al hígado de los ediles oficialistas para con el alcalde dejará más de un herido, ya que con esta jugada, Zara estaría borrando posibles candidatos a concejales que -según decían- repetirían para mantener su banca.
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