Estudiantes de Caseros venció 2-1 a Chacarita por la fecha 16 de la Zona B de la Primera Nacional, pero el gran logro del 'Pincha', que le quitó el invicto al 'Funebrero', se vio empañado por los graves incidentes que se desarrollaron en el estadio Ciudad de Caseros. 

El elenco visitante, uno de los animadores del certamen, llevó una gran cantidad de allegados que se hicieron sentir. Eso provocó la ira de la barra local, que se trasladó hasta el sector donde se ubicaban y comenzaron a lanzarles proyectiles en el entretiempo.

Tras la intervención policial y con el balón rodando nuevamente, las aguas se calmaron, pero ante el temor de que el problema recrudeciera, el operativo se centró en la salida de la gente de 'Chaca', que había llegado en automóviles particulares y micros. 

El defensor de Platense, Nicolás Morgantini, quien se encontraba como espectador en otro sector del estadio, también fue blanco de los violentos y terminó internado con politraumatismos. Según informó el club, este martes será operado por una fractura de tabique nasal. 

En diálogo con LaNoticia1.com, el titular de la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (APREVIDE), Eduardo Aparicio, anunció que como consecuencia de los graves incidentes "Estudiantes jugará sus próximos tres partidos como local a puertas cerradas".

Pese a que descartó la posibilidad de una clausura del estadio, sostuvo que los violentos episodios ocurridos el domingo "siguen siendo materia de investigación". Y si bien por ahora no hay detenidos, "las autoridades están trabajando para identificar a los agresores". 

Respecto del jugador de Platense agredido, que había concurrido junto a un amigo para ver a Gianluca Pugliese -delantero 'Calamar' que se encuentra a préstamo en el 'Funebrero'- señaló que "no estaba ni con la delegación de Chacarita ni en la platea, sino en la popular local".  

"En la tribuna primero le recriminaron por qué no gritaba los goles y después lo reconocieron como jugador de Platense, ahí llegaron las agresiones", explicó Aparicio, quien sostuvo que el operativo policial fue correcto y que "ese tipo de situaciones son muy difíciles de prevenir". 

"Nada justifica una brutal agresión de esa naturaleza pero haber concurrido a la popular siendo futbolista de otro equipo no era lo más aconsejable. De haber sabido, lo hubiéramos acomodado en uno de los palcos del estadio", indicó Aparicio a LaNoticia1.com. 

En tanto, pese al escueto comunicado lanzado por Estudiantes luego de los incidentes, Aparicio sostuvo que el presidente de la institución 'Pincharrata', Jorge Barrios, "estuvo a disposición desde el primer momento y visitó al jugador que sigue internado en la clínica CEMIC".

Por su parte, desde el club de Vicente López reclamaron sanciones para los responsables. "Desde el Club Atlético Platense repudiamos enérgicamente lo sucedido y exigimos se tomen las medidas que correspondan ante tan grave episodio", emitieron en un comunicado.