Gustavo Gómez, titular de la Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte, fue despedido de su cargo tras el escándalo por la Copa Argentina que lo tuvo como principal protagonista. El hecho ocurre tras la suspensión del partido entre Tigre y Los Andes por los 32vos. de final. 

El cotejo se iba a jugar este miércoles en Lanús pero desde el Municipio rechazaron recibir a las hinchadas por considerarlo partido de "alto riesgo". Goméz determinó entonces que el partido se pase a Morón y a puertas cerradas, lo que provocó el enojo del club Los Andes que no se presentó a jugar. 

La resolución adoptada por Gómez no iba en línea con lo conversado entre Sergio Berni, Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires y los presidentes de ambas instituciones en la previa del duelo que en un principio, debía disputarse en el estadio Néstor Díaz Pérez del club Lanús.

Aunque los motivos no fueron oficialmente informados, se supo que la decisión de desplazarlo también están relacionados con "una serie de operativos fallidos" y desinteligencias de quienes conducían el organismo y, fundamentalmente, la escalada de violencia durante este año. 

En ese conetxto, cabe recordar los recientes cruces en la barra de Independiente y el ataque de los hinchas de Racing a simpatizantes de Deportivo Cali. En marzo, la Aprevide ya había dicho que no recibiía más partidos de Copa Argentina tras los incidentes entre hinchas de Banfield y Quilmes. 

Pero eso no es todo, el 25 de enero de este mismo año también se registraron serios incidentes en la ciudad de La Plata con los hinchas de Boca Juniors en la previa del duelo ante San Lorenzo, por el Torneo Internacional de Verano, que incluyó balas de goma y una impactante estampida. 

Como consecuencia de todos los operativos fallidos, finalmente la Provincia decidió desplazar a Gustavo Gómez el mismo día que comienza la Liga Profesional en nuestro país. También serán relevados los policías que ocupaban los principales cargos ejecutivos vinculados a la seguridad en el deporte.